Análisis: Primeros Cinco Partidos de ADT Bajo la Dirección Interina de Leo Rojas Muestran Luces y Sombras
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En términos generales, el rendimiento de ADT con Rojas se resume en dos triunfos, un empate y dos derrotas, lo que se traduce en siete puntos obtenidos de quince posibles, con un promedio de 1.40 puntos por partido. El equipo ha marcado seis goles y ha recibido siete en este lapso.
Tácticamente, Rojas ha mostrado una clara preferencia por el sistema 4-2-3-1, implementado en cuatro de los cinco encuentros, con una única variación al 4-3-1-2 en el duelo ante Juan Pablo II. Esta elección sugiere una búsqueda de equilibrio, con una doble contención en el mediocampo para proteger la defensa, y la apuesta por un tridente creativo detrás de un único delantero.
El inicio de su interinato fue prometedor, con dos victorias consecutivas ante UTC y Cusco FC, donde el equipo mostró solidez y efectividad ofensiva. Sin embargo, esta racha positiva se vio frenada en las tres jornadas más recientes, en las que ADT no ha conseguido ganar: sufrió derrotas ante Alianza Atlético y Sporting Cristal, y cedió un empate en casa frente a Juan Pablo II, un rival directo.
Entre las principales preocupaciones que deja este periodo se encuentran la vulnerabilidad defensiva, habiendo recibido goles en cuatro de los cinco compromisos; la poca contundencia jugando fuera de casa, con solo una victoria como visitante ante un UTC en crisis; y una marcada falta de regularidad en el rendimiento tras el buen arranque.
En conclusión, Leo Rojas ha intentado imprimir un sello de mayor orden y volumen ofensivo en ADT, aunque la solidez defensiva sigue siendo una tarea pendiente. El equipo ha exhibido pasajes de buen fútbol, pero necesita urgentemente mejorar la concentración en los tramos finales de los partidos, donde ha dejado escapar puntos importantes.
Mientras la directiva del club toma una decisión oficial sobre su continuidad, Rojas ha sumado argumentos y puntos para ser considerado como entrenador titular. Su principal reto, de confirmarse en el cargo, será consolidar una identidad táctica clara y rescatar al equipo de la irregularidad que lo ha caracterizado.